Horacio Marín, presidente y director ejecutivo (CEO) de YPF, reafirmó la determinación estratégica de ceder su participación mayoritaria en Metrogas, la principal empresa de distribución de gas natural de Argentina. Tras la presentación de los resultados del tercer trimestre, el ejecutivo fue tajante ante la comunidad de inversores: el propósito es vender "lo antes posible", una vez que se garantice la extensión de la licencia de la distribuidora.
La declaración de Marín no solo acelera una desinversión que se había mantenido en stand by, sino que la vincula directamente con la necesidad de obtener capital y con la estrategia corporativa de concentrar los recursos en el negocio de exploración y producción petrolera (upstream).
El cronograma para el traspaso
En la conferencia telefónica con inversores, Marín delineó el procedimiento que la compañía seguirá para materializar la desinversión. El primer requisito ineludible es la ampliación de la licencia de operación de Metrogas, a la cual el CEO se refirió específicamente como una "concesión".
“Estamos en proceso de extender el contrato de la compañía. Más que un contrato, se trata de una concesión. Nuestra idea es que, después de eso, empecemos (la preparación de oferta) con el banco y vendamos lo antes posible”, sostuvo Marín.
El titular de YPF precisó que la venta obedece a una necesidad operativa: “Por la integración vertical que tenemos en la compañía, tenemos que vender”. Con estas palabras, Marín deja atrás la cautela que había mostrado hace más de un año, cuando, aunque anunció la decisión de vender, indicó que no era el "momento" oportuno. En aquella ocasión, el ejecutivo había sugerido una postergación estratégica, considerando que el valor de la empresa mejoraría con la recuperación macroeconómica argentina.
Metrogas: Un activo malioso en el Mercado
YPF posee la mayoría accionaria de Metrogas, con una participación del 70%. El remanente de las acciones está distribuido entre la empresa norteamericana Integra Gas Distribution (9,23%), la Administración Nacional de la Seguridad Social (8,23%) y el 12,6% que se comercializa en bolsa.
La operación de venta de Metrogas es una acción requerida por la ley argentina. La normativa vigente prohíbe que una única compañía concentre las actividades de producción, distribución y comercialización de gas para prevenir monopolios y fomentar la competencia. De hecho, ya en 2017 el gobierno nacional había aconsejado a YPF desinvertir en la distribuidora.
El valor y la certidumbre del negocio de Metrogas están directamente supeditados a la vigencia de su licencia operativa. La concesión actual, que cubre 35 años desde la privatización de Gas del Estado, expira el 28 de diciembre de 2027.
Ante esta situación, a mediados de mayo, Metrogas solicitó formalmente en Audiencia Pública la extensión de su licencia por 20 años adicionales, un paso crucial para asegurar la rentabilidad de la empresa de cara a cualquier inversor potencial interesado.
Metrogas es la distribuidora de gas natural de mayor envergadura en Argentina, sirviendo a aproximadamente el 27% de los habitantes del país en un área de 2.150 kilómetros cuadrados. Esta área incluye la totalidad de la Ciudad de Buenos Aires y una docena de municipios del Gran Buenos Aires, con más de 2,4 millones de clientes residenciales, 69.000 comercios, 6.000 industrias y 319 estaciones de GNC.
Como parte de la revisión para la extensión, Metrogas aseguró haber invertido alrededor de $1.155 millones de dólares a lo largo de los 32 años de vigencia del contrato, a pesar de los “sucesivos incumplimientos del Estado nacional de los contratos de concesión” y los 20 años bajo congelamiento tarifario.