Después de varios meses de dilaciones y una última postergación previa a los comicios, el Gobierno nacional concretará este viernes una etapa determinante en su plan de venta de activos estatales. Se darán a conocer las compañías que aspiran a asumir la explotación por 30 años de las cuatro centrales hidroeléctricas del Comahue, las cuales producen, en conjunto, cerca del 15% de la electricidad del país.
las expectativas del Gobierno se centran en obtener entre US$500 y US$700 millones a través de este proceso licitatorio, el cual se puso en marcha en agosto y llega a su fin hoy. La operación consiste en la enajenación de la totalidad de las acciones de las entidades responsables de la gestión de los complejos ubicados en Alicurá; El Chocón-Arroyito; Piedra del Águila y Cerros Colorados.
Dichas centrales son operadas actualmente por AES Argentina (que este año ganó un litigio contra Argentina en el Ciadi por US$700 millones), Enel, Central Puerto y Orazul, respectivamente. La reprivatización se ha dispuesto debido a que los acuerdos de concesión de estas empresas expiraron a partir de agosto de 2023. Las firmas deben asegurar la continuidad del servicio hasta el 31 de diciembre o hasta que la administración de las instalaciones sea transferida a nuevos operadores privados.
Con base en información del mercado, se anticipa que los cuatro concesionarios actuales presentarán propuestas para retener las represas que ya manejan y posiblemente para alguna otra unidad. No obstante, los pliegos de la licitación establecen restricciones, impidiendo que un mismo consorcio se adjudique más de dos complejos hidroeléctricos.
También se ha reportado el interés de empresas como Pampa Energía, Genneia, Edison Energía y el coloso del sector del aluminio, Aluar. Desde las oficinas gubernamentales se explicó que:
“Las represas son activos superavitarios que generan mucho interés. Se recibieron más de 300 consultas por el pliego y se espera recibir unas 10 ofertas”.
Una vez identificados los postores, el equipo de la Agencia de Transformación de las Empresas Públicas, dependiente del Ministerio de Economía, se dedicará a la evaluación de la documentación y los antecedentes presentados.
Posteriormente, en el transcurso de las próximas semanas, se harán públicas las propuestas económicas, las cuales deben incluir el abono de un canon a las provincias de Neuquén y Río Negro por el uso del recurso hídrico. Finalmente, se procederá a la preadjudicación. Se calcula que la toma de control de las centrales del Comahue por parte de los nuevos concesionarios se materializará entre fines de este año y principios de 2026.
El Gobierno extiende su meta a siete represas adicionales
Mientras se resuelve la reprivatización de los complejos del Comahue, el Ejecutivo ha iniciado el proceso para la concesión de otras siete centrales hidroeléctricas, cuyos contratos expirarán progresivamente entre el 30 de noviembre y el 30 de julio de 2026.
Estas instalaciones incluyen los complejos Futaleufú (cuyo contrato expiró en junio y se extendió hasta diciembre), Cabra Corral, El Tunal, Ullum, El Cadillal, Escaba y Pueblo Viejo.
En este contexto, la compañía estatal Enarsa (que supervisa estas centrales concesionadas a privados) convocó esta semana a una audiencia pública con el objetivo de contratar una auditoría técnica para estas siete represas.
El propósito de la auditoría es determinar el estado actual de la maquinaria de cada complejo y estimar la inversión necesaria para garantizar su adecuado funcionamiento antes de una eventual reprivatización.